El abrazo de despedida

Ella sintió como sus esquemas se derrumbaban, como sus bloques emocionales estallaban contra el piso. Sintió que él ya no la miraba como antes, que el brillo tan característico de sus ojos se había opacado. ........... Dices que recuerdas la primera cita, la primera risa, el primer beso, el primer abrazo con sensación eterna, el primer consuelo de aquella primera lágrima, la primer caída y de como nos levantamos. Dices que recuerdas exactamente todas las maneras en que fuimos alimentando nuestra relación y nuestro amor. Dices que éramos felices, así como dos personas que se aman y se aceptan. Que fueron años hermosos llenos de momentos placenteros. Tratas de convencerme de que eramos una pareja alegre, con iniciativa y proyectos. Que nuestro amor rompió todas las barreras y que llegó a tocar el cielo con las manos. Me muestras fotos juntos, de la mano y a los besos. Te entusiasmas con historias del pasado. Yo no estuve allí, le sonríes a tu memoria. Perdón, pero no entiendo el motivo de tu llanto. No entiendo como puedes decirme que yo te amaba y que debería hacerlo ahora. Estoy desorientado, me hablas de amor como si lo entendieras o peor aún, como si yo lo entendiera. Lo único que puedo decir al respecto, es que no hay amores destinados a ser. Si es cierto que en algún momento te amé, no significa que tenga que hacerlo ahora. Si pude enamorarme alguna vez de ti, no significa que pueda hacerlo ahora. Quizás antes me sentía solo o me moría de ganas de vivir a tu lado. Quizás solo bastó una mirada o tuve que mover cielo y tierra para tenerte, no lo sé. No puedo enamorarme solo porque la gente me dice que lo estaba. Ustedes me confunden ¿Así son siempre? No pueden imponerme nada. Entiendan que el amor no tiene lógica, no pueden hablar de él como si fuera una ciencia. Es como el fuego, que puede encenderse en plena sequía e incrementar su volumen con el viento, como así también puede apagarse con una tormenta. Se da o no se da. Se siente o no se siente. No se quién eres pero no me gusta verte llorar, ojalá puedas juntar todas esas fotos y encontrar a alguien que te ame como dices que yo lo hacía. Tienes que entender que no puedo enamorarme con un relato, ni sentir con imágenes. No comprendo nada de lo que pasa a mi alrededor, solo puedo decirte que el amor es eso que nadie puede explicar, por eso es tan mágico. Hoy no puedo hacer magia contigo, hoy no puedo darte explicaciones. Simplemente perdí la memoria para siempre en un accidente, según los médicos. Quizás hace unos días estaba enamorado de tí, pero hoy no encuentro esos motivos. No tengo brillo en mis ojos para mirarte porque no se quien eres. Te deseo lo mejor, y lo mejor sería que te olvides de mí. No gastes energía en hacerme recuperar la memoria, el amor es mágico pero no hace milagros. Gasta esa energía en vivir, en soñar y en buscar tu felicidad en otro lado. Puede parecer egoísta, pero no soporto que me mires así, como si tus ojos reflejaran un pasado perfecto. Hoy vuelvo a nacer, solo puedo aceptarte un café y una charla como dos desconocidos. No somos otra cosa, solo dos desconocidos, pero para eso deberías dejar de mirarme así.

Parece que necesitas un abrazo. Puedo darte uno, no esperes que sea cálido, recuerda que para mí eres una desconocida. Incluso para ti, debería ser el abrazo de despedida...